Según las agencias de viaje en línea, el volumen de las reservas realizadas en casas de hospedaje en el popular distrito montañoso y rural de Miyun, perteneciente a la capital Pekín, fue tres veces superior en una comparativa interanual.
Este sábado, Pekín, Shanghái (este), Chengdu (centro), Cantón (sur) y Chongqing (centro) ocuparon las cinco primeras posiciones entre las ciudades con mayor número de reservas realizadas para visitar los principales sitios de interés locales.
“El hecho de que haya más personas que viajen a nivel local ayudará a expandir el potencial de crecimiento de los recursos”, declaró Shen Jiani, del instituto de investigación de Trip.com, la agencia de viajes en línea más grande de China.
Por su parte, Zhou Weihong, de la agencia Springtour, afirmó en declaraciones recogidas por China Daily que la organización de recorridos locales se ha convertido en una nueva oportunidad de crecimiento para las agencias.
Un turismo local en crecimiento influenciado por la política china de cero tolerancia contra el coronavirus, que incluye desde hace más de dos años el aislamiento de todos los contagiados y sus contactos cercanos, el cierre de las fronteras al turismo y cuarentena para todos los viajeros, la limitación de vuelos internacionales y campañas masivas de pruebas PCR allá donde se detecta algún caso.
Es por eso que el Ministerio de Transporte de China estimó que se realizarán unos 210 millones de viajes por carretera durante el feriado, un 30% menos que en la misma época del año pasado.
También se espera que los viajes en tren en el país experimenten una caída del 50%, con unos 68.5 millones de pasajeros entre el 28 de septiembre y el 8 de octubre, según la cadena de televisión estatal CGTN.
El país asiático ha sufrido en los últimos meses oleadas de rebrotes atribuidas a la variante ómicron que han provocado cifras récord de contagios no vistas desde el inicio de la pandemia en la primera mitad de 2020, que se saldaron con el confinamiento total o parcial de grandes ciudades como Shanghái (este), Chengdu (centro) y un considerable impacto económico.
Las autoridades sanitarias del gigante asiático reiteraron el mes pasado que la estrategia es “la más económica y científica” para el país porque “detecta rápidamente nuevos contagios y contiene la propagación al menor costo y lo antes posible”.
Según las cuentas oficiales chinas, desde el inicio de la pandemia, se infectaron 251,040 personas en el país y fallecieron 5,226, aunque la cifra total de infectados excluye a los asintomáticos
