Por ello, y en conmemoración del aniversario de la capital húngara, el país ha preparado un amplio programa cultural para este verano con el que los visitantes podrán descubrir los innumerables museos y lugares de la ciudad, así como asistir a numerosos festivales que abarcan desde el vino y la gastronomía, hasta la música y la cultura.
Hasta el 31 de agosto, el Museo del Ferrocarril Subterráneo, ubicado en la Plaza Deák presentará una nueva exposición temporal sobre la historia del transporte público en la capital. En ella, se realizará una mirada a los eventos más importantes en la historia del transporte, las innovaciones pioneras, la aparición de medios de transporte individuales y a algunos de los vehículos más significativos.
Con esta exposición, los 150 años de historia de Budapest cobran vida simbólicamente a través de 150 objetos, fotografías y películas.
Además la ciudad contará con cine de verano a la luz de las estrellas. Los Baños Széchenyi ofrecerán durante todo el mes de julio acceso a piscina del balneario mientras disfrutan de su película favorita bajo la luz de las estrellas.
Hace 60 años se inauguró en el Museo de Bellas Artes una exposición completa de las obras de Csontváry Kosztka Tivadar, uno de grandes pintores pertenecientes a la época vanguardista húngara.
Este año, conmemorando el 170 aniversario del nacimiento del artista, se ha organizado una exposición en la que los visitantes tendrán la posibilidad de admirar una selección de pinturas en el Museo de Bellas Artes de Budapest hasta mediados de julio. Después, las obras de arte viajarán al Museo Csontváry en Pécs, donde estarán en exhibición durante tres meses.
El 15 de febrero se abrieron las puertas de una nueva y única arena cultural en Budapest: el nuevo edificio del Teatro Nacional de Danza, ubicado en el Parque del Milenario.
Equipado con técnicas teatrales de última generación, el nuevo edificio cuenta con dos espacios de teatro y salas de cámara para los amantes de la danza, así como zonas de ensayo para los bailarines profesionales.
El vestíbulo del edificio también puede convertirse en un área comunitaria abierta para los visitantes, donde se estarán celebrando actuaciones únicas hasta finales de año.
Este año, Veszprém ostenta el título de una de las Capitales Europeas de la Cultura (ECC), junto con Timisoara en Rumanía y Eleusis en Grecia. Por ello, la ciudad se ha unido con 116 pueblos y ciudades participantes para ofrecer casi 3.000 programas culturales a lo largo del año cultural-creativo.
Lo que comenzó hace 23 años como un concurso para encontrar a los mejores músicos callejeros del país, se ha convertido en uno de los eventos musicales gratuitos más populares de Hungría.
Gracias a la hospitalidad de la ciudad, el Festival de Música Callejera de Veszprém es una de las grandes citas del año en la que, durante cuatro días, los artistas de música callejera compiten en los rincones más clásicos de Veszprém.
El festival se celebró del 20 al 23 de julio y presentó artistas internacionales en 12 lugares diferentes, con 24 conciertos por la noche y 20 conciertos durante el día.
Por su parte, Inota, el festival audiovisual contemporáneo más grande de Hungría, se centrará en ofrecer actuaciones musicales innovadoras, así como instalaciones de luz, mapeos y otras impresionantes obras visuales. Tendrá lugar entre los días 31 de agosto y 3 de septiembre en el edificio de la antigua central térmica de Inota, la mayor inversión industrial de Hungría en la década de 1950.
Un complejo que tiene como objetivo crear un diálogo profesional entre representantes de diferentes disciplinas artísticas e industrias creativas para crear una visión ambiciosa y orientada hacia el futuro sobre los posibles usos del edificio.
