Mirando hacia el futuro, el Ministro Ersoy ha fijado una meta ambiciosa para 2024: alcanzar los 60 millones de visitantes. Para lograr este objetivo, Turquía planea enfocarse no solo en sus mercados tradicionales, sino también en expandirse hacia nuevas regiones. Específicamente, se busca atraer a un mayor número de turistas de Norteamérica, incluyendo Estados Unidos y Canadá, así como de los países nórdicos, como Suecia, Noruega, Dinamarca y Finlandia. Además, la estrategia incluye un impulso en los mercados de Asia-Oceánica, con un énfasis particular en China, India y Australia.

Este enfoque diversificado busca no solo incrementar el número de visitantes internacionales, sino también fortalecer la posición de Turquía como un destino turístico de primer nivel en el escenario mundial. Con una rica herencia cultural, impresionantes paisajes naturales y una hospitalidad incomparable, Turquía se posiciona como un destino atractivo para una amplia gama de turistas, desde aquellos interesados en la historia y la cultura hasta los amantes de la aventura y la naturaleza.

A medida que Turquía avanza hacia su objetivo de 2024, el país continúa desarrollando su infraestructura turística y ampliando su oferta de experiencias para satisfacer y superar las expectativas de los visitantes. Con iniciativas que van desde la mejora de la conectividad aérea hasta la promoción de turismo sostenible, Turquía se esfuerza por ofrecer una experiencia turística rica y diversa que pueda captar el interés de viajeros de todo el mundo.