Su perfil contrasta claramente con el de otros aspirantes a la Secretaría General, quienes si bien poseen méritos nacionales, carecen de una experiencia global comparable o de una participación directa en la arquitectura internacional del turismo.
En el proceso de campaña, Guevara ha sostenido reuniones con más de 50 ministros de Turismo de todos los continentes, y ha obtenido el respaldo de más de 200 líderes del sector privado, así como de una veintena de instituciones académicas. Esta red de apoyos refuerza su credibilidad como candidata de consenso, capaz de unir sensibilidades diversas y generar acciones concretas. La elección, que tendrá lugar el 30 de mayo en Segovia, España, se desarrollará en un clima de expectativa por el relevo tras la retirada de Zurab Pololikashvili, quien intentó sin éxito postularse a un tercer mandato, una intención que fue ampliamente criticada por contravenir la tradición de los organismos multilaterales.
Guevara no ha eludido la controversia, y ha señalado con firmeza que su candidatura se basa en la legitimidad, la transparencia y el respeto a las reglas. Ha cuestionado la experiencia internacional de algunos de sus rivales, subrayando que ninguno de ellos cuenta con una trayectoria equivalente en organismos internacionales ni con una interlocución sistemática y prolongada con el sector turístico global.
Además, ha denunciado presiones políticas y diplomáticas ejercidas en las últimas semanas para influir en el resultado de la elección, y ha reiterado su llamado a un proceso limpio, donde prevalezcan la competencia ética y el mérito profesional. Según Guevara, el turismo requiere hoy más que nunca de un liderazgo con visión estratégica, que entienda los retos globales del sector, como la transformación digital, la sostenibilidad, la inclusión de comunidades locales y la preparación ante crisis futuras.
Su propuesta incluye una hoja de ruta construida a partir de las necesidades planteadas por los Estados miembros, con objetivos medibles, líneas de acción concretas y mecanismos de rendición de cuentas. También contempla el fortalecimiento institucional de ONU Turismo, la descentralización de sus acciones y una mayor articulación con otros organismos internacionales. Su enfoque apuesta por empoderar a los destinos emergentes, integrar la innovación en la toma de decisiones y promover una gobernanza turística basada en datos y evidencia.
De ser elegida, Guevara haría historia como la primera mujer mexicana y latinoamericana en liderar ONU Turismo, una designación que representaría un cambio de rumbo tras años de cuestionamientos sobre la gestión del actual liderazgo. Su elección también abriría la puerta a una representación más equitativa de las regiones del sur global, tradicionalmente infrarepresentadas en los máximos órganos de decisión del turismo internacional.
El voto final será validado durante la Asamblea General de ONU Turismo, que se celebrará en noviembre en Arabia Saudita. Si ningún candidato obtiene mayoría absoluta en la primera ronda, se realizará una segunda votación entre los dos más votados. En cualquiera de los escenarios, Gloria Guevara parte como la aspirante con mayor experiencia internacional, la más articulada con los actores clave del sector y la única con una visión global realista y ambiciosa para el futuro del turismo.