"Alaska se enorgullece de desempeñar un papel en el avance de este mercado crítico para los combustibles de aviación sostenibles", dijo Ann Ardizzone, vicepresidente de la cadena de suministro de Alaska Airlines. "Hacer que el SAF sea comercialmente viable a escala requiere de socios fuertes y de acciones en todos los frentes. Apreciamos la colaboración de proveedores como Gevo para afrontar este reto."
En abril de 2021, Alaska anunció el compromiso y la hoja de ruta de la compañía para lograr el carbono neto cero en 2040, y estableció un camino de cinco partes para lograr ese objetivo.
La senda incluye la eficiencia operativa, la renovación de la flota, el combustible de aviación sostenible, los aviones eléctricos o híbridos-eléctricos a largo plazo y las compensaciones de carbono creíbles sólo en la medida en que sean necesarias para alcanzar nuestros objetivos si la tecnología no avanza lo suficientemente rápido como para cerrar la brecha sin.
De esta vía, el combustible de aviación sostenible ofrece la mayor oportunidad de descarbonizar a corto y medio plazo, y Alaska lleva más de una década trabajando para probar primero y utilizar después el SAF.
En 2016, Alaska y Gevo hicieron historia al realizar el primer vuelo comercial del mundo con residuos forestales desde el Aeropuerto Internacional de Seattle-Tacoma hasta el Aeropuerto Nacional Reagan en Washington, D.C., impulsado por una mezcla del 20% de SAF. En la actualidad, Alaska utiliza SAF en sus operaciones en California y trabaja con múltiples productores y otros socios para utilizar y facilitar el desarrollo de un suministro adicional de SAF en el futuro.
El informe ESG más reciente de Alaska -su informe Care- expone con más detalle sus objetivos y progresos, y detalla los retos específicos y las acciones necesarias para el avance del SAF.
En septiembre de 2020, oneworld se convirtió en la primera alianza mundial de aerolíneas en anunciar un objetivo de neutralidad de carbono para 2050, estableciendo su compromiso con la sostenibilidad a largo plazo del sector. La alianza siguió ese compromiso con un objetivo intermedio de alcanzar el 10% de uso de SAF en todas las aerolíneas miembros para 2030.