Algunos de los nuevos barcos incluyen los proyectos piloto y ensayos con nuevos combustibles que se están realizando en estos momentos. El estudio señala que un número creciente de las naves que ya están operando o que debutarán en los próximos cinco años utilizarán combustibles alternativos o podrán incorporar combustibles cero en carbono en el momento en el que estén disponibles.
Asimismo, el informe destaca la apuesta de las navieras por la conexión a la red eléctrica en los puertos, lo que facilita el apagado de los motores cuando los barcos están amarrados, reduciendo significativamente las emisiones.
“Hoy se están construyendo los barcos del futuro; estos utilizarán tecnologías nuevas y más sostenibles”, afirma la presidenta & CEO de CLIA, Kelly Craighead.
Conexión a la red eléctrica
120 barcos de la flota de CLIA (46% del total) están equipados con sistemas que permiten la conexión eléctrica a tierra. A ellos se unirán el 86% de los buques que debutarán en los próximos cinco años.
Actualmente, 32 puertos (frente a los 29 de 2022) cuentan con muelles electrificados -menos del 2% de puertos a nivel mundial-.
De cara a 2028, se espera que más de 210 barcos (72% de la flota) puedan conectarse a la red eléctrica.
Sistemas avanzados de tratamiento de aguas residuales
El 77% de la flota de CLIA (202 buques) están equipados con sistemas de tratamiento de aguas residuales
El 100% de los barcos de nueva construcción estarán equipados con estos sistemas, lo que supondrá que 242 buques cuenten con esta tecnología (80% de la flota).
Desde 2019, se ha incrementado en un 167 % el número de buques equipados con sistemas de tratamiento de aguas residuales que cumplen con los estándares de la Zona Especial del Báltico (más estrictos). Hoy, cerca de un tercio de la flota de CLIA cuenta con esta capacidad.
Combustibles renovables y fuentes de energía alternativa
Dentro de la flota de CLIA, cuatro barcos utilizan ya biocombustibles como fuente de energía y otros cuatro más serán equipados para poder utilizarlos.
Se están desarrollando ensayos con biocombustibles en 24 barcos y con combustibles sintéticos en dos.
Se prevé que siete barcos en construcción utilizarán combustibles cero en carbono: cinco de ellos emplearán metanol verde y otros dos, hidrógeno verde.
El 15 % de los barcos de nueva construcción que entren en servicio en los próximos cinco años utilizarán baterías y / o pilas de combustible que permitirán sistemas híbridos de generación de energía.
El Gas Natural Licuado (GNL)
El 48% de los barcos de nueva construcción estará construido con motores de GNL. Pertenecen a una nueva generación de buques que podrán utilizar combustibles marinos sostenibles una vez que los proveedores los hagan disponibles a escala.
El GNL es actualmente el combustible fósil disponible a escala con un mejor comportamiento de cara a reducir las emisiones atmosféricas, según un análisis efectuado por la organización SeaLNG y otras entidades
El estudio “Prácticas y tecnologías ambientales 2023” señala que, con el fin de disponer de mayor flexibilidad en combustibles, las compañías de cruceros están invirtiendo en sistemas de propulsión que puedan ser compatibles con diferentes soluciones. En esta línea, se están ejecutando 32 proyectos de colaboración con compañías productoras de combustibles y con fabricantes de motores.
Aunque es necesario también que “los gobiernos apoyen la investigación en esta materia y que establezcan un marco regulatorio claro y estable; de esta forma los proveedores de combustibles y otros actores podrán realizar los desarrollos que se necesitan”, señala el presidente de CLIA, Pierfrancesco Vago.
Respecto a la conexión a la red eléctrica en tierra, CLIA recuerda que en 2022 se comprometió a que en 2035 los barcos que atraquen en puertos donde esté disponible esta rede deberán utilizar la misma o tecnologías alternativas bajas en carbono (según disponibilidad) para reducir las emisiones en el puerto.