Albino defendió que las áreas protegidas deben dejar de ser espacios aislados y pasar a formar parte del entramado económico local. La producción de alimentos para habitantes y visitantes en un marco de sostenibilidad se perfila como una estrategia doblemente ventajosa: fomenta el comercio local y refuerza la autosuficiencia bajo principios de responsabilidad ambiental.
El foro en Maputo, organizado bajo los auspicios del African Diplomatic Tourism and Investment Forum, no solo representó un punto de encuentro diplomático e inversionista, sino que fue escenario para reivindicar el turismo como eje estratégico del desarrollo nacional. El enfoque en la protección ambiental, sureñado al mismo tiempo con acciones concretas, envía una señal clara: Mozambique apuesta por un crecimiento económico que no sacrifica sus valores ni sus paisajes.
La relevancia del turismo para la economía mozambiqueña fue también destacada por otros líderes durante este foro. La primera ministra, Maria Levi, en su discurso inaugural, presentó el turismo como una herramienta de soberanía económica y cohesión continental. Levi enfatizó la ventaja competitiva del país, desde su ubicación estratégica en el Océano Índico hasta la riqueza de su gastronomía, pueblos hospitalarios y su capacidad para atraer visitantes a través de una experiencia auténtica y diversa. Junto a ella estuvieron presentes ministros clave como el de Economía y el de Comunicaciones y Transformación Digital, poniendo en evidencia una postura gubernamental unificada frente a la necesidad de posicionar al turismo en el centro de una estrategia de desarrollo articulada.
Además, el African Tourism Board, representado por su presidente ejecutivo, Cuthbert Ncube, respaldó firmemente esta visión durante una cena de gala realizada en torno al foro. Ncube hizo un llamado a aumentar la inversión en turismo respaldada por gobiernos que fortalezcan los principios democráticos y la conectividad entre destinos africanos, así como el desarrollo de infraestructura básica que favorezca el crecimiento del sector en toda la región.
Este foro, que coincidió con la celebración del 50.º aniversario de la independencia del país, ofreció un espacio para que Mozambique consolidara su liderazgo y sendas de cooperación continental. La restauración del Parque Nacional de Gorongosa, convertido en paradigma de conservación eficiente, y proyectos exitosos como la revitalización del archipiélago Pazarruta y la reintroducción de los cinco grandes mamíferos en parques regionales, fueron destacados como ejemplos palpables del turismo integrado con la protección de la biodiversidad.
Esta conferencia ha sido mucho más que un acto protocolario. Ha servido como platforma para consolidar una visión alternativa de desarrollo: una que reconcilia la economía, la ecología y la diplomacia. Mozambique apunta a convertirse en referente africano en turismo sostenible, invirtiendo no solo en infraestructuras, sino también en reglas, instituciones e ideas orientadas a un futuro más próspero y equilibrado. Este enfoque holístico y estratégico permite dibujar un panorama donde la belleza natural, el bienestar social y el crecimiento económico coexisten de manera simbiótica.