A finales de la década de 1920, la Romería del Rocío comenzó a consolidarse como un activo turístico para Almonte y las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, coincidiendo con las primeras políticas turísticas en España y tras la Coronación Canónica de la Virgen del Rocío en 1919. La Exposición Iberoamericana de 1929 en Sevilla y el Congreso Mariano Internacional celebrado ese mismo año utilizaron la Romería como elemento promocional destacado.
Durante los planes desarrollistas en España y el proyecto de urbanización de Matalascañas, la Romería del Rocío se convirtió en un elemento clave para los promotores. La concesión del título de Fiesta de Interés Turístico en 1965 la situó junto a celebraciones emblemáticas como los Sanfermines, las Fallas, el Corpus de Toledo y la Semana Santa de Sevilla, Málaga o Jerez de la Frontera. Este reconocimiento impulsó mejoras en infraestructuras, como la construcción de carreteras y la electrificación de la aldea, y respaldó proyectos significativos como la construcción del nuevo Santuario del Rocío entre 1963 y 1969.
Posteriormente, la Romería fue reconocida como Fiesta de Interés Turístico Internacional en 1979 y recibió la Placa al Mérito Turístico en su categoría de Plata en 1980. Ese mismo año, la Secretaría de Estado de Turismo financió el cartel de la Romería de Pentecostés. Eventos destacados como la Clausura de los Congresos Mariano y Mariológico en septiembre de 1992 y la visita de S.S. San Juan Pablo II en junio de 1993 reforzaron su proyección internacional.
En 2012, la Hermandad creó la Oficina de Atención al Peregrino tras obtener de la Santa Sede la concesión del primer Año Jubilar de su historia. En 2014, se inauguró el Museo-Tesoros del Santuario del Rocío, un espacio dedicado a la interpretación y difusión de la Romería y del patrimonio histórico-artístico de la Hermandad Matriz. En 2017, se logró la Afinidad Espiritual con la Basílica de Santa María la Mayor en Roma, fortaleciendo aún más los lazos espirituales y culturales.
La Hermandad Matriz de Almonte destaca que la Romería del Rocío es una manifestación de religiosidad popular que ha trascendido fronteras, atrayendo a miles de peregrinos y visitantes de todo el mundo. Este evento no solo es una expresión de fe, sino también un motor económico y cultural para la región, promoviendo el turismo y contribuyendo al desarrollo local.
En su declaración, la Hermandad reafirma su compromiso con la promoción y conservación de la Romería del Rocío, reconociendo su importancia histórica y su impacto positivo en el turismo. Asimismo, hace un llamado a las instituciones y a la sociedad en general para que continúen apoyando y participando en esta tradición centenaria, garantizando su preservación para las generaciones futuras.
La Hermandad también subraya la necesidad de mantener un equilibrio entre la afluencia turística y la conservación del entorno natural y patrimonial de El Rocío. Destaca la importancia de implementar prácticas sostenibles que aseguren la protección del medio ambiente y la integridad de los espacios sagrados, permitiendo que la Romería siga siendo un referente de devoción y cultura.
En este sentido, la Hermandad Matriz de Almonte se compromete a trabajar en colaboración con las autoridades locales, regionales y nacionales, así como con otras entidades y colectivos, para promover iniciativas que fomenten un turismo responsable y respetuoso. Entre estas iniciativas se incluyen programas de sensibilización, mejoras en infraestructuras y servicios, y la promoción de actividades culturales y educativas que enriquezcan la experiencia de los visitantes y peregrinos.
La declaración concluye enfatizando que la Romería del Rocío es un patrimonio vivo que debe ser cuidado y valorado por todos. La Hermandad Matriz de Almonte invita a todos los interesados a unirse en este esfuerzo común para asegurar que esta tradición única continúe floreciendo y aportando beneficios espirituales, culturales y económicos a la comunidad y a todos aquellos que participan en ella.
Con esta declaración institucional, la Hermandad Matriz de Almonte reafirma su compromiso con la promoción del turismo en El Rocío, reconociendo la importancia de la Romería como un evento de relevancia internacional que contribuye al desarrollo económico, cultural y espiritual de la región.