El informe también destaca que EE.UU. mantiene su atractivo como destino de innovación, tecnología y vanguardia, factores que influyen en la decisión de viaje, especialmente entre los segmentos jóvenes y con alta conectividad digital. Asimismo, el país es percibido como una opción segura, bien conectada y con infraestructuras de alta calidad, lo que genera confianza en el viajero internacional. A pesar de que ciertos temas como la política migratoria, los visados o los controles fronterizos pueden generar algunas reservas, estos elementos no afectan significativamente la decisión de viajar, ya que los beneficios percibidos superan las posibles incomodidades.
Chris Thompson, presidente y CEO de Brand USA, subraya la importancia de este tipo de análisis para adaptar las estrategias de promoción turística. "El estudio demuestra que la marca Estados Unidos sigue siendo fuerte y relevante. Nos permite entender mejor qué motiva a los viajeros a elegirnos y qué barreras debemos seguir trabajando para eliminar", explicó Thompson. En este sentido, Brand USA continúa enfocando sus esfuerzos en campañas de marketing emocional y experiencial que conectan con los intereses del viajero moderno, buscando fomentar un turismo más sostenible, diverso y distribuido por todo el territorio nacional.
La labor de Brand USA ha sido clave para reconstruir la posición turística del país tras los efectos de la pandemia de COVID-19. Desde la reapertura total de las fronteras en 2021, la organización ha desplegado una estrategia intensiva para reactivar los flujos turísticos, incluyendo alianzas con aerolíneas, operadores turísticos, plataformas digitales y medios de comunicación. La implementación de herramientas tecnológicas, como su plataforma de contenido GoUSA TV o la presencia activa en redes sociales, ha sido determinante para mantener la conexión emocional con el público global.
Además, la organización ha puesto énfasis en diversificar la oferta turística del país, promoviendo experiencias en entornos naturales, culturales e históricos que contribuyen a descongestionar los principales destinos urbanos y generan un impacto positivo en economías locales menos favorecidas. Esta estrategia también responde a una creciente demanda por parte de los viajeros internacionales de vivir experiencias auténticas, personalizadas y respetuosas con el medio ambiente y las comunidades locales.
Según las últimas previsiones del Departamento de Comercio de los Estados Unidos, se espera que el país reciba más de 90 millones de visitantes internacionales en 2025, una cifra que consolidaría su recuperación total y lo situaría nuevamente entre los destinos más visitados del mundo. En este escenario, la percepción positiva que se mantiene a nivel global será un factor determinante para mantener la competitividad del destino estadounidense frente a otras potencias turísticas como Francia, España o China.
Estados Unidos continúa proyectándose como un destino turístico de primer nivel, con una imagen sólida, moderna y abierta. La capacidad del país para reinventarse y diversificar su oferta, junto con una estrategia de promoción bien enfocada en las expectativas del viajero internacional, augura un panorama favorable para los próximos años. Brand USA seguirá desempeñando un papel esencial en esta trayectoria, apostando por una visión integradora del turismo como motor de crecimiento económico, conexión intercultural y sostenibilidad a largo plazo.