“America the Beautiful” nace con una estructura narrativa bien definida: una matriz de historias emocionales, paisajes icónicos y la extraordinaria diversidad cultural del país. No se limita a mostrar destinos, sino que busca transmitir experiencias auténticas, conectando con la nostalgia, la curiosidad y la riqueza sensorial que define el viaje por Estados Unidos. Leah Chandler, directora de marketing de Brand USA, destacó que esta plataforma pretende “ofrecer una nueva mirada al público mundial”, inspirada en lo que siempre ha atraído a los visitantes: esa fusión entre sensibilidad emocional e inmersión cultural.
Un elemento diferencial de la campaña es la incorporación de inteligencia artificial en un centro digital interactivo: AmericaTheBeautiful.com. Desarrollado junto a Mindtrip, este hub ofrece una experiencia de planificación personalizada basada en preferencias, rutas y comportamientos del usuario. Andy Moss, cofundador y CEO de Mindtrip, subrayó que “facilita una experiencia inolvidable, impulsando conversaciones positivas y memorables alrededor de la marca EE UU”.
Además, Brand USA se une al Departamento de Transporte para lanzar la iniciativa “The Great American Road Trip”, destacando 250 lugares destacados que ilustran el valor cultural y paisajístico de viajar por carretera en EE UU. Se trata de un guiño potente a la clásica tradición del road‑trip americano, amenizada para una audiencia global.
Los resultados recientes demuestran que la estrategia de Brand USA tiene bases sólidas: en el ejercicio fiscal 2024, impulsaron la llegada de 1,6 millones de viajeros internacionales en exceso, generando 6 000 M USD en gasto turístico, y permitiendo la creación o sustento de 80 000 empleos estadounidenses; el impacto económico total alcanzó los 13 000 M USD. Asimismo, su estudio Omnibus revela que EE UU sigue en primer lugar entre los destinos largo recorrido con mayor intención de visita, especialmente en mercados clave como Japón, Francia, Corea del Sur, Canadá y México.
Este nuevo despliegue cobra relevancia ante el contexto del turismo global: los números desde Canadá, por ejemplo, han caído cinco meses consecutivos, con una reducción de un 24 % en viajes de ida y vuelta en mayo respecto al año pasado. Aún así, “America the Beautiful” busca revertir estas tendencias, posicionando a EE UU. como un destino renovado, diverso y emocionalmente enriquecedor.
La campaña se desmarca de lo puntual para convertirse en el vehículo estratégico de toda una década cargada de grandes acontecimientos: celebraciones como America250 (250.º aniversario de la nación en 2026), el centenario de la ruta 66, la Copa Mundial de la FIFA 2026, y los Juegos Olímpicos de Verano (2028) e Invierno (2034), además de las primeras ediciones en suelo estadounidense de las Copas del Mundo de Rugby masculinas y femeninas (2031 y 2033). El objetivo: articular itinerarios sostenibles y promover estancias más largas que aporten un retorno económico sólido a las comunidades locales .
Nueva infraestructura y experiencias también forman parte de este visionado: Universal Epic Universe en Orlando, Mattel Adventure Park en Kansas, MegaZip en Tennessee, el Museum of BBQ en Kansas City, el pionero Dataland en Los Ángeles, la boutique hotelera The Compton en Arkansas, la vía scénica Adirondack Rail Trail en Nueva York y el Spekboom Lodge en el zoológico de San Antonio, entre otros. Esta diversidad refuerza el mensaje de que EE UU. puede ofrecer desde aventuras extremas hasta relax, gastronomía, arte y ecoturismo.
La conectividad aérea respalda esta apuesta: en 2025 Estados Unidos contará con más de 853 000 vuelos directos en 1 683 rutas, conectando 249 ciudades internacionales con 84 aeropuertos nacionales. Este año se suman 44 rutas nuevas desde 26 países, que añaden 1,6 millones de asientos extra; destacan conexiones como Orlando‑París, Nashville‑Dublín o San Francisco‑Adelaide. Una infraestructura sólida que facilita el flujo turístico global.
“America the Beautiful” no es solo una campaña de promoción: es una redefinición estratégica que combina narración emocional, tecnología de vanguardia, eventos de escala global y la riqueza tangible de destinos y experiencias. Con una hoja de ruta clara que abarca desde 2025 hasta 2034 y una inversión con impacto económico medible, Brand USA apuesta por convertir los próximos diez años en una década decisiva para el turismo estadounidense. Las expectativas son altas y el terreno está fértil; la pregunta es si los viajeros del mundo querrán descubrirlo.