La ruta turística se centra en los vínculos del Papa León XIV con la ciudad de Trujillo, donde pasó parte de su formación religiosa y desarrolló actividades pastorales antes de asumir responsabilidades internacionales dentro del Vaticano. Aunque su pontificado es relativamente reciente, su trayectoria vital, cargada de simbolismo y humildad, ha dejado huella en muchas comunidades peruanas. Por ello, el recorrido propuesto incluirá templos históricos, casas donde residió, centros de formación religiosa y espacios de acción pastoral que formaron parte de su vida y obra en la región.
Además de ofrecer una experiencia espiritual profunda, esta propuesta turística está concebida como una herramienta de desarrollo económico para las comunidades involucradas. El gobernador regional de La Libertad, César Acuña, señaló que el proyecto generará empleo directo e indirecto en sectores como transporte, gastronomía, artesanía, guías turísticos y servicios de alojamiento. También destacó la oportunidad que representa para revalorizar el patrimonio religioso y cultural de la zona, integrándolo en un circuito turístico sostenible y con estándares internacionales de calidad.
Desde la iglesia local, el arzobispo Miguel Cabrejos Vidarte expresó su entusiasmo por el proyecto y reafirmó el compromiso de la arquidiócesis de colaborar activamente en su desarrollo. Cabrejos, quien es también presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), subrayó que esta iniciativa no solo honra la memoria de una figura que ha servido con humildad a la Iglesia universal, sino que también ofrece una nueva forma de evangelización a través del turismo.
Según las proyecciones de la Gerencia Regional de Comercio Exterior, Turismo y Artesanía, la ruta atraerá inicialmente a unos 48,000 visitantes en su primer año, entre turistas nacionales y extranjeros. Se espera un impacto significativo en la economía local, con un crecimiento de más del 25% en la demanda de servicios turísticos en la zona. También se prevé un aumento del interés de medios internacionales y operadores turísticos especializados en turismo religioso, lo cual podría posicionar a Trujillo como uno de los nuevos destinos clave de peregrinación en Sudamérica.
El diseño y promoción de la ruta han contado con el asesoramiento de expertos en turismo cultural y religioso, así como con el respaldo de la Red Mundial de Turismo Religioso, entidad que promueve la valorización de destinos vinculados a la espiritualidad y la fe en todo el mundo. Esta colaboración ha permitido que el proyecto incorpore estándares de accesibilidad, sostenibilidad e innovación tecnológica, como el uso de audioguías multilingües, señalética inteligente y plataformas digitales para la reserva de visitas guiadas.
La propuesta forma parte de un esfuerzo más amplio del Perú por diversificar su oferta turística más allá de los destinos tradicionales como Machu Picchu, Cusco o Lima, promoviendo rutas temáticas que permitan a los visitantes descubrir la riqueza espiritual, histórica y cultural de regiones menos exploradas. En este sentido, Trujillo, con su combinación de legado colonial, expresiones religiosas vivas, y una población hospitalaria, emerge como un ejemplo claro de cómo el turismo puede articular desarrollo local, memoria y fe.
Con esta iniciativa, Trujillo no solo rinde homenaje a uno de los personajes más influyentes de la Iglesia en las últimas décadas, sino que también se proyecta hacia el futuro como un polo de atracción para el turismo religioso, que año tras año moviliza a millones de personas en el mundo. La ruta del Papa León XIV promete convertirse en un camino de reflexión, encuentro y descubrimiento, donde la historia personal de un líder espiritual se entrelaza con la identidad de todo un pueblo.