Trump suaviza deportaciones para proteger al turismo

17-06-25

El Gobierno de Estados Unidos ha anunciado un cambio inesperado en su política de deportaciones que, lejos de relajar el rigor migratorio por convicción, responde a una estrategia calculada para proteger sectores económicos clave, especialmente el turismo, la hostelería y la agricultura. Bajo la dirección de Donald Trump, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha recibido instrucciones claras: suspender las redadas y arrestos masivos en entornos laborales turísticos —hoteles, restaurantes, parques temáticos y atracciones turísticas—, y en explotaciones agrícolas y empacadoras de alimentos, aunque no en casos relacionados con delitos graves como trata de personas, narcotráfico, lavado de dinero o violencia organizada.

Este giro supone una rectificación voluntariosa de la política migratoria más estricta, impulsada por Tom Homan y Stephen Miller, que buscaba alcanzar hasta 3.000 detenciones diarias para expulsar a un millón de inmigrantes irregulares al año. Sin embargo, el endurecimiento de los operativos ha generado una creciente alarma entre empresarios y comunidades locales. Hoteleros, agentes turísticos, restauradores y ganaderos señalaron que el éxodo de trabajadores —con muchos de ellos empleados durante décadas— estaba socavando la capacidad de producción y la viabilidad operativa de sus negocios .