Es recomendable que la solicitud se realice al menos tres días antes del viaje, ya que, aunque la mayoría de las autorizaciones se aprueban en pocas horas, algunas pueden requerir más tiempo de procesamiento. Una vez aprobada, la ETA tendrá una validez de dos años o hasta la fecha de expiración del pasaporte, lo que ocurra primero, y permitirá múltiples entradas al Reino Unido durante su vigencia.
Estarán exentos de solicitar la ETA aquellos viajeros que posean un visado aprobado, sean residentes en el Reino Unido o tengan pasaporte irlandés. Además, quienes realicen una escala en el Reino Unido sin pasar por control de fronteras, como en los aeropuertos de Heathrow y Manchester, tampoco necesitarán esta autorización.
Esta nueva medida forma parte de la estrategia del Reino Unido para modernizar y fortalecer su sistema de control migratorio, asegurando un proceso más eficiente y seguro para los millones de personas que visitan el país cada año. Se estima que alrededor de dos millones de viajeros procedentes de España se verán afectados por esta normativa.
El embajador británico en España, Alex Ellis, ha destacado la importancia de cumplir con este nuevo requisito, subrayando que "simplemente pretende mejorar la gestión de la seguridad" y ha reiterado que el Reino Unido "está encantado de seguir recibiendo viajeros desde España", quienes "hacen una gran aportación al país".
Para facilitar el proceso, el gobierno británico ha puesto a disposición de los viajeros una aplicación móvil y una página web oficial donde se detallan los pasos a seguir para la solicitud de la ETA. Se recomienda a los viajeros que utilicen únicamente estas plataformas oficiales para evitar posibles fraudes o cargos adicionales por intermediarios no autorizados.
Es importante destacar que la ETA no sustituye al pasaporte, sino que es un requisito adicional. Por lo tanto, los viajeros deberán presentar ambos documentos al ingresar al Reino Unido. Además, aquellos que planeen estancias superiores a seis meses o con fines distintos a los permitidos por la ETA, deberán solicitar el visado correspondiente.
Esta iniciativa del Reino Unido se alinea con tendencias globales en materia de control migratorio, donde cada vez más países implementan sistemas electrónicos de autorización de viaje para mejorar la seguridad y eficiencia en sus fronteras. Se espera que la Unión Europea introduzca un sistema similar para ciudadanos británicos en un futuro próximo.