¿Qué ocurriría si se produjera el cierre del gobierno de EE.UU. en el turismo?
15-03-25
A pesar de que el Senado aprobó este viernes por la noche un proyecto de ley para financiar el gobierno hasta el otoño, evitando un cierre apenas unas horas antes de la fecha límite de la medianoche, es inevitable preguntarse qué habría sucedido si no se hubiera alcanzado un acuerdo. Un cierre del gobierno en los Estados Unidos no solo afecta a los empleados federales, sino que también tiene un impacto directo en la industria del turismo, generando retrasos en aeropuertos, afectando la emisión de pasaportes y visas, y perjudicando a negocios que dependen del flujo constante de viajeros.
Un cierre gubernamental ocurre cuando el Congreso no aprueba un presupuesto para financiar las operaciones del gobierno, lo que resulta en la suspensión de servicios no esenciales. Aunque algunos sectores pueden seguir funcionando, el turismo es uno de los más vulnerables, ya que depende en gran medida de agencias federales que gestionan aeropuertos, fronteras y sitios turísticos.
Aeropuertos y control de tráfico aéreo
Durante un cierre del gobierno, los aeropuertos seguirían operando, pero con limitaciones. Los controladores de tráfico aéreo y los agentes de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) son considerados empleados esenciales, por lo que continuarían trabajando, aunque sin recibir su salario de inmediato. Sin embargo, en cierres prolongados, la moral y la disponibilidad del personal podrían disminuir, aumentando los tiempos de espera en los controles de seguridad y generando retrasos en los vuelos. En experiencias pasadas, la falta de pago ha llevado a un ausentismo significativo, lo que ha afectado la eficiencia de los aeropuertos y la programación de vuelos.