Termómetro social del turismo: España suspende

27-10-25

La percepción ciudadana del turismo en España continúa deteriorándose y entra de lleno en terreno de “suspenso”. Según la última lectura del Barómetro de Percepción Turística de LLYC, el índice cae en verano (julio-septiembre de 2025) hasta 4,3 sobre 10, cuatro décimas menos que en primavera, confirmando una tendencia descendente que se alimenta, sobre todo, del malestar por la masificación y la presión sobre la vivienda en los destinos más tensos. El termómetro reputacional —que analiza trimestralmente la conversación digital en redes sociales, foros y medios online— sitúa así al sector ante un reto urgente: reconciliar crecimiento con bienestar local, alinear la experiencia del visitante con la calidad de vida de residentes y contener los impactos más visibles del éxito turístico. 

El deterioro no es coyuntural: desde el inicio de la serie en enero de 2022, la reputación del turismo se ha reducido un 35%. En julio de 2025, LLYC ya había detectado un descenso notable, con un retroceso trimestral de 1,2 puntos (de 5,9 a 4,7) asociado al auge de mensajes críticos por gentrificación, saturación del espacio público y pérdida de accesibilidad a la vivienda. La lectura de otoño profundiza esa pendiente: de la nota 4,7 del segundo trimestre se baja a 4,3 en el tercero, consolidando un clima de opinión más exigente con el modelo turístico y con la forma en que se gestiona su expansión.