Visión 2030 impulsa el turismo religioso en Arabia Saudí
El turismo religioso sigue siendo uno de los principales beneficiarios de Visión 2030. De hecho, la contribución del mercado al PIB saudí aumentó al 7% desde el 3% en 2016, el año en que el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman dio a conocer Visión 2030, con el turismo anunciado como un sector central que cataliza el objetivo del país de lograr un crecimiento económico sostenible.
Para 2030, el país aspira a acoger a 30 millones de peregrinos, como parte de un objetivo más amplio de atraer a 150 millones de turistas nacionales e internacionales al año, en consonancia con la Visión Saudí 2030.
La introducción de los visados electrónicos en 2018 marcó el comienzo de nuevos avances para la industria turística del país en general, permitiéndole atraer a visitantes religiosos y no religiosos de todo el mundo, con el objetivo final de que el turismo constituya el 10% de su PIB y cree 1,6 millones de puestos de trabajo.
El progreso sostenido del mercado del turismo religioso influye directamente en el sector laboral del Reino y aumenta las perspectivas de empleo para los talentos locales. Según las estadísticas del gobierno, el espacio del turismo religioso empleó a una mano de obra de 236.000 personas en 2022, lo que subraya el papel del sector en el impulso de la saudización del país.
Aumento de las oportunidades de negocio en la hostelería
A medida que el país avanza para convertirse en uno de los mayores mercados emisores de turismo del mundo, el efecto económico del creciente turismo religioso reverbera con fuerza en una plétora de industrias auxiliares como el comercio minorista, el alojamiento y la hostelería, impulsando aún más al país en su trayectoria económica ascendente.
El resurgimiento del turismo saudí ha provocado un aumento de la actividad hotelera en todo el país, sobre todo en La Meca y Medina, que figuran entre las ciudades más visitadas del mundo y del Reino. En medio de la evolución del panorama hotelero del país, las ciudades de La Meca y Medina, juntas, suman más del 75% de los hoteles que operan en el país: La Meca cuenta con 450.000 habitaciones de hotel en 1.151 hoteles con licencia y Medina incorpora 75.000 habitaciones de hotel.
Las dos ciudades santas se están convirtiendo en focos de atracción para grandes marcas hoteleras que buscan un crecimiento y una expansión continuos para aprovechar las perspectivas de crecimiento a largo plazo y atender la demanda global de peregrinos religiosos. Un claro ejemplo es Abraj Kuda, que será el mayor del mundo, enclavado en La Meca, con una capacidad prevista de 10.000 habitaciones cuando esté terminado.
En el marco de la estrategia Visión 2030, está previsto construir unas 221.000 nuevas habitaciones de hotel en estas dos ciudades, haciendo honor a su potencial como catalizador decisivo para las inversiones extranjeras y fomentando el crecimiento de los sectores del turismo y la hostelería.
A este impulso del mercado contribuyen un par de proyectos de desarrollo a gran escala orientados a la ciudad santa. Uno es Makkah Masar Destination, un desarrollo urbano transformador que mejora la vida de residentes y visitantes mediante actividades, proyectos de conectividad y espacios públicos. Se espera que el proyecto proporcione un total de 24.000 habitaciones. El otro es Rua Al Madinah, que se espera que añada más de 47.000 habitaciones de hotel, generando 93.000 oportunidades de empleo.
La creciente estatura del Reino como líder mundial del turismo ha sido la fuerza impulsora de la mejora del sector hotelero saudí, con las ciudades santas a la vanguardia de un cambio transformador hacia el aprovechamiento de todo el potencial del turismo para el crecimiento inclusivo.
Construir una infraestructura resistente para soportar el aumento de viajeros
Un factor clave que contribuye al continuo crecimiento del turismo religioso en Arabia Saudí son sus excepcionales infraestructuras. En los últimos años, el gobierno ha realizado importantes inversiones en infraestructuras mediante el desarrollo de servicios de transporte y logística que satisfacen las necesidades de los peregrinos y facilitan su viaje desde y hacia las Dos Mezquitas Sagradas, en consonancia con los objetivos esbozados en Visión 2030.
Algunos ejemplos son el Programa de Transporte Público de La Meca, la puesta en marcha del tren Al-Haramain (dos mezquitas sagradas) y el proyecto de ampliación del Aeropuerto Internacional Rey Abdulaziz (KAIA), anunciado recientemente por valor de 31.000 millones de dólares, que pretende aumentar su capacidad para acoger a 114 millones de pasajeros al año.
Dado que las infraestructuras siguen siendo un área en la que se centran las inversiones nacionales y extranjeras, las empresas internacionales se sienten atraídas por las oportunidades de mercado que ofrece el Reino, entre ellas Grankraft, miembro de la red de expansión de AstroLabs.
La empresa se ha expandido recientemente al mercado saudí, donde aprovecha su polifacética experiencia en diseño, ingeniería, fabricación y construcción para encabezar dos proyectos clave de infraestructuras en Arabia Saudí. Se trata del Hotel Sheybarah South, que forma parte del proyecto Red Sea Global Island, y del Aeropuerto Internacional Rey Jaled. Actualmente, Grankraft trabaja en la construcción de una balsa de techo de última generación para el Hotel Shura Island.
Con un aumento significativo en el número de visitantes como parte de la Visión 2030 de Arabia Saudí, las dos ciudades santas de La Meca y Medina están llamadas a ser un centro prolífico para más inversiones en los próximos años y el catalizador de cambios positivos en el ámbito del turismo y la hostelería, impulsando el rápido crecimiento del país como centro mundial para la innovación y el comercio.