El año pasado fue un año récord para el mercado de las criptomonedas, cuyo valor superó los 3 billones de dólares durante un breve periodo en noviembre de 2021. 

El Bitcoin, en particular, fue noticia en febrero del año pasado, cuando alcanzó un valor de mercado de 1 billón de dólares, lo que suscitó el debate sobre si la criptodivisa se convertiría en una forma de pago aceptada en los viajes. 

En la actualidad, mientras el mercado se enfrenta a la inflación, el precio de Bitcoin ha caído a menos de 20.000 dólares la semana pasada, y los expertos esperan que continúen los altibajos.

Los proveedores de viajes que aceptan criptodivisas dicen estar experimentando una fluctuación similar -cuando el precio del Bitcoin, o de otras criptodivisas, sube, también lo hace el negocio-, pero eso no es raro.

La aerolínea letona airBaltic, que afirmó ser la primera compañía aérea en aceptar Bitcoin en 2014, ha observado una tendencia similar. Comparativamente, en septiembre del año pasado, la aerolínea informó de que durante el tercer trimestre de 2021, el número de reservas pagadas con criptodivisas aumentó un 44% respecto al mismo periodo de 2020.

Dejando de lado la volatilidad del mercado, existen otras barreras para la adopción generalizada de los pagos con criptodivisas en los viajes.

Por un lado, en los países desarrollados, las compañías de tarjetas de crédito tienen un dominio bastante fuerte sobre la financiación y la forma de pagar. Por supuesto, los consumidores pagan por los servicios de las tarjetas de crédito, pero nadie se da cuenta de cuánto están pagando por ello.

Para los proveedores de viajes, permitir que los clientes paguen en criptomoneda conlleva su propio conjunto de retos tecnológicos. Muchos hoteles, por ejemplo, todavía tienen dificultades para aceptar el pago con tarjeta de crédito a través de Internet.

Es probable que los proveedores de viajes también necesiten una plataforma intermediaria, como Coinbase o BitPay, para gestionar el pago. Con más de un billón de dólares invertidos actualmente en criptomonedas, el sector de los viajes no debería dejar pasar la oportunidad.

La criptomoneda, y la tecnología blockchain que la sustenta, también puede ayudar a las marcas de viajes a fidelizar a sus clientes.